Desde el desarrollo del concepto de inteligencia por Binet hace más de 100 años, comenzó a ser un elemento central en concebir el éxito y resultados.
Posteriormente comenzaron a publicarse diversos estudios e investigaciones que han revisado sus utilidades y limitaciones.
Nos parece interesante compartir un trabajo recientemente publicado que plantea el lugar de la motivación frente a la inteligencia para los éxitos y resultados. En una muestra de 3250 niños se encontró que una vez iniciados en las matemáticas, la inteligencia tuvo un lugar mucho menos importante que la motivación en su éxito y en cuánto estudiaban.
¡Esperamos sea de tu interés!
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